El juicio volverá a fundarse en la justicia, y todos los rectos de corazón lo seguirán. (Salmo 94:15)

El verbo hebreo shapat puede traducirse de varias maneras, entre ellas “juzgar”, “gobernar”, “vindicar”, “decidir”, “defender” y “librar”. En las Escrituras hebreas, la palabra combinaba a menudo las tres funciones principales del gobierno -ejecutiva, legislativa y judicial- que las naciones occidentales modernas separan.

Por eso a líderes como Gedeón, Sansón y Débora se les llamaba jueces. Cuando leemos la palabra “juez” en las Escrituras hebreas, debemos recordar que a menudo connota el significado más amplio de “gobernar” o “gobernante”. Los profetas a menudo reprendían a los gobernantes de Israel por no actuar con justicia, reservando sus palabras más duras para aquellos que ignoraban los derechos de los extranjeros, los pobres, los huérfanos y las viudas.

Cuando oramos a Dios nuestro Shophet, estamos orando a Aquel cuya rectitud exige una justicia, pero que también ha proporcionado un camino para que seamos absueltos de nuestra culpa a través de la vida, muerte y resurrección de su Hijo.

Ora a Dios que es Rey y Juez de éste mundo…

Ora por los dirigentes de tu país. (Salmo 72:1-19)

Ora para que Dios juzgue a los gobernantes opresores. (Salmo 94:1-15)

Ora para que el Señor establezca su reino mediante su perfecta justicia. (Isaías 11:1-9)